Para muchos cultivadores, la malla sombra es una condición perfecta para cultivar sus plantas. Algunas plantas, además de resistir mejor la malla sombra, resultan tener mejores cosechas debido a la menor luz solar directa. Las temperaturas más bajas bajo la malla sombra también son una ventaja, junto con la disminución de la evaporación frente al viento más comprensivo. Esto permite a un cultivador disfrutar de muchas diferentes variedades de cultivos que de otro modo no sería posible bajo plena luz solar. Los cultivos que crecen bien bajo la malla sombra cubren una amplia gama, desde vegetales como los tomates, la acedera, las espinacas y los rabanitos; hortalizas como zanahorias, ñames, berenjenas y verduras de hoja oscura; frutas como nectarinas, plátanos y cerezas; hierbas como el romero, el tomillo y el orégano; cítricos como limones, naranjas y pomelos.
Los cultivos plantados en la malla sombra también requieren algo más de contenido de agua, pero pueden tolerar cortos períodos de sequía. El hecho de estar bajo malla sombra no significa sinónimo de problemas. Es necesario entender que la malla sombra es un condimento para los cultivos bajo estas condiciones. Algunas plantas se ven beneficiadas por una malla sombra clara, ya que pueden funcionar bien pero sus cosechas no están limitadas por la presencia constante de luz solar intensa. Esta también es una excelente opción para los jardines que se tienen al sol todo el día. Los elementos como el suelo, la exposición al aire libre, el clima y los requerimientos de riego y abono para los cultivos bajo malla sombra son realmente importantes para obtener los mejores resultados. El suelo debe estar bien drenado y no debe quedarse demasiado húmedo.
Controle la luz solar con malla sombra
El aire libre ayuda a cruzar la humedad con el aire sin que este último se vea tan afectado como lo haría debajo de una estructura con una cubierta sólida. La cantidad de luz solar que llega al área de cultura debe ser controlada de acuerdo a la especie de planta elegida. También es importante tener en cuenta los requerimientos de riego y fertilización para los cultivos que exigen sombra. Esto a veces requiere una mezcla de diferentes fracciones de compuestos orgánicos, sílice y minerales para mantener los niveles necesarios de calidad ideal para el suelo. Los abonos orgánicos generalmente tienen una amplia variedad de nutrientes, e incluso muchos microorganismos necesarios para promover la salud de los cultivos en estas zonas.
Una vez que los ingredientes se han colocado bajo un huerto de sombra, será necesario controlar la cantidad de luz que llega a cada cultivo. Esto se puede hacer de varias formas, como cultivar los mismos cultivos cerca pero moviéndolos periódicamente, usando reflectores cuando sea necesario para reflejar la luz del sol, cubriendo algunos cultivos con plástico cuando sea necesario, entre otras. Para garantizar que los cultivos bajo sombra no reciban demasiada luz, es posible protegerlas con varias formas, como plantando árboles nativos y otros arbustos, usando toldos y seguros con materiales que impidan la luz solar, y abanicando la zona con materiales como la tierra, fibras vegetales, tela artesanal, lona u otros materiales naturales. La planificación de los mismos puede hacer la diferencia en mantener los niveles de luz óptima para los cultivos.
Otros cultivos que crecen en la sombra son
Espinacas: Espinacas es una hortaliza muy nutritiva y deliciosa que puede ser cultivada con éxito en la mayoría de los climas. Ya sea en macetas en un balcón o en un huerto, el cultivo de espinacas es una buena manera de tener un suministro de verduras de calidad disponible durante todo el año. Las espinacas son una planta bienal pero que se cultiva como una anual. Esto significa que, si se deja que la planta florezca en su segundo año, las semillas que forme serán resistentes a las condiciones climáticas en su ubicación particular. Esto significa que, si cuidas la planta apropiadamente, puedes obtener el mismo resultado de una planta anual y ahorrar dinero al mismo tiempo.
Lechuga: La lechuga es una hortaliza muy popular entre las personas, ya que le gusta por su sabor delicioso y por sus muchas aplicaciones culinarias. Algunos tipos de lechuga también pueden ser comidas crudas, como en ensaladas. Si bien la lechuga está disponible durante todo el año, la temporada de crecimiento de la lechuga comienza cada año en primavera. Esto significa que algunas lechugas tienen mejor sabor cuando son cosechadas en esta época del año.
Habas: Las habas se cultivan en casi todos los países del mundo. Esto significa que cada región tiene sus propias variedades, técnicas de cultivo y preparación. Por lo tanto, hay una gran diversidad en los estilos y clases de habas. Si bien hay algunos aspectos básicos de cultivo de habas, se pueden personalizar según el clima, el suelo y la cantidad de agua disponible. Para empezar, es importante tener en cuenta que el clima afecta el proceso de crecimiento y desarrollo de las habas. Si hay periodos de frío intenso, las habas no crecerán tan rápido como si se siembran en un clima cálido.
